Los Trastornos de la Conducta Alimentaria (TCA) son afecciones serias que afectan tanto la salud física como emocional. Como alguien que ha vivido esta experiencia, sé lo crucial que es para las familias reconocer las señales de alarma. Aquí comparto algunas de las más comunes:
1. Cambios en los hábitos alimentarios
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Saltarse comidas o comer en secreto.
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Obsesión por contar calorías o seguir dietas extremas.
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Evitar comer en público o con la familia.
2. Comportamientos compensatorios
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Uso de laxantes o diuréticos sin prescripción médica.
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Ejercicio físico excesivo, incluso cuando está enfermo o lesionado.
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Ir al baño inmediatamente después de comer.
3. Cambios físicos
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Pérdida o aumento de peso drástico en poco tiempo.
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Fatiga constante, mareos o desmayos.
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Pérdida del ciclo menstrual en mujeres.
4. Cambios emocionales y sociales
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Irritabilidad, depresión o ansiedad.
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Aislamiento social o pérdida de interés en actividades antes disfrutadas.
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Preocupación excesiva por la imagen corporal.
¿Qué hacer si notas estas señales?
Si reconoces estos síntomas en un ser querido, es importante abordar la situación con empatía y sin juicio. Anima a la persona a buscar ayuda profesional y ofrece tu apoyo incondicional. La detección temprana puede marcar una gran diferencia en el proceso de recuperación.
Conclusión:
Los TCA son trastornos complejos, pero con el apoyo adecuado, la recuperación es posible. Como madre y sobreviviente, te animo a estar atento a estas señales y a actuar con amor y comprensión.